De entre los reptiles utilizados como animales de compañía, las tortugas son, sin duda, unos de los más populares.
Si has decidido tener una tortuga como mascota, lo primero que has de saber es si ésta es de tierra o de agua, ya que la alimentación y los cuidados que necesita son diferentes según sea de un tipo u otro.
Para ayudarte a averiguarlo, te explicamos cómo saber si una tortuga es de tierra o de agua.
La especie
Si tienes esa posibilidad, pregunta donde adquiriste tu tortuga por el nombre de la especie a la que pertenece.
Las tortugas de tierra que más habitualmente se encuentran como mascota pertenecen a la familia de los testudínidos.
Dentro de esta familia hay varios tipos (géneros), siendo el más importante el género Testudo, al que pertenecen la tortuga mediterránea (Testudo hermanni), la tortuga mora (Testudo graeca), la tortuga rusa (Testudo horsfieldii) o la tortuga marginada(Testudo marginata).
También se incluyen en la familia de los testudínidos el género Geochelone, que incluye la tortuga leopardo (Geochelone pardalis) y la tortuga de patas rojas (Geochelone carbonaria), entre otras.
En cuanto a tortugas de agua, el género más conocido es el Trachemys. A este género pertenecen la tortuga de orejas rojas o galápago de florida (T. scripta elegans) y latortuga de orejas amarillas (T. scripta scripta).
También son de agua las tortugas del género Pseudemis, cuyo representante más conocido es la tortuga de vientre rojo de Florida (P. nelsoni).
Hay que tener cuidado porque algunas especies de tortugas, como la tortuga mora (T. Graeca) están protegidas por la ley en muchos países.
Las patas
La forma más sencilla de saber si una tortuga es de agua o de tierra es fijarse en sus patas.
Las patas de las tortugas de agua están diseñadas para ayudarles a nadar, por eso tienen unas membranas entre los dedos de las patas, llamadas membranas interdigitales, fáciles de observar a simple vista.
Por contra, las tortugas de tierra no presentan estas membranas, y, si observas las patas traseras, podrás comprobar que tienen forma de tubo y los dedos están muy poco desarrollados, casi como si se tratase de muñones.
Por otra parte, aunque no es tan sencillo de apreciar, las uñas de las tortugas de agua suelen ser más largas y puntiagudas, mientras que las uñas de las tortugas de tierra son más romas y en algunos casos no son fáciles de observar a simple vista ya que están atrofiadas.
El caparazón
El caparazón también varía según el tipo de tortuga, pues está adaptado al medio donde vive el reptil.
Un caparazón
liso ayuda a las tortugas acuáticas a desplazarse por el agua sin ofrecer
tanta resistencia, por esta razón los caparazones de las tortugas de agua son
mucho más suaves y lisos que los de las tortugas de tierra, que suelen tener caparazones bastante rugosos e
irregulares.
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